15 Pero si la parte no creyente quiere separarse, que se separe, en ese
caso el hermano o la hermana no están ligados: para vivir en paz os llamó el
Señor.
16 Pues ¿qué sabes tú, mujer, si salvarás a tu marido? Y ¿qué sabes tú,
marido, si salvarás a tu mujer?
17 Por lo demás, que cada cual viva conforme le ha asignado el Señor,
cada cual como le ha llamado Dios. Es lo que ordeno en todas las Iglesias.
18 ¿Que fue uno llamado siendo circunciso? No rehaga su prepucio.
¿Que fue llamado siendo incircunciso? No se circuncide.
19 La circuncisión es nada, y nada la incircuncisión; lo que importa es
el cumplimiento de los mandamientos de Dios.
20 Que permanezca cada cual tal como le halló la llamada de Dios.
21 ¿Eras esclavo cuando fuiste llamado? No te preocupes. Y aunque
puedas hacerte libre, aprovecha más bien tu condición de esclavo.
22 Pues el que recibió la llamada del Señor siendo esclavo, es un
liberto del Señor; igualmente, el que era libre cuando recibió la llamada, es
un esclavo de Cristo.